El Ventano del Diablo es un mirador natural en forma de cueva. Se encuentra en el margen del río Júcar desde donde puedes disfrutar de la imponente caída hasta el río y de las espectaculares vistas del barranco del Júcar.
Es una parada recomendada en el camino si visitas la Sierra de Cuenca, se encuentra al pie de la carretera que une el pueblo de Villalba de la Sierra con la Ciudad encantada.
Recibe el nombre por ser el lugar donde el Demonio realizaba sus sesiones de brujería y empujaba al abismo a quienes se asomarán por las ventanas al vacío. Una leyenda que le encaja a la perfección a este curioso mirador natural, que la erosión kárstica sobre la roca caliza ha moldeado a capricho, quedando un punto turístico emblemático en el Parque Natural de la Serranía de Cuenca.
Este mirador también da nombre al Barranco del río Júcar, donde se realiza la actividad del Barranquismo acuático, y a la famosa Vía Ferrata del Ventano del Diablo, que te permite ver los cortados del Júcar de una forma única.